Bendice tu hogar, rocÍalo con agua bendita y recita esta
oración:
«Padre Celestial, te pedimos tu bendición sobre nuestro
hogar. En el nombre de tu Hijo Jesús, te pedimos ser liberados del pecado y de
toda influencia maligna.
Protegernos de enfermedades, accidentes, robos y todas las
tragedias domésticas.
Colocamos nuestro hogar bajo el Señorío de Jesús y lo
consagrarnos al Inmaculado Corazón de María.
Que todos los que aquí vivimos recibamos tu bendición de paz
y amor».
No hay comentarios:
Publicar un comentario