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PLEGARIA IRRADIANDO A CRISTO

Oremos la plegaria Irradiando a Cristo

Amado Señor,ayúdame a esparcir tu fragancia donde quiera que vaya. Inunda mi alma de espíritu y vida.

Penetra y posee todo mi ser hasta tal punto que toda mi vida solo sea una emanación de la tuya.

Brilla a través de mí, y mora en mí de tal manera que todas las almas que entren en contacto conmigo puedan sentir tu presencia en mi alma. Haz que me miren y ya no me vean a mí sino solamente a ti, oh Señor.

Quédate conmigo y entonces comenzaré a brillar como brillas Tú; a brillar para servir de luz a los demás a través de mí.

La luz, oh Señor, irradiará toda de Ti; no de mí;serás Tú quien ilumine a los demás a través de mí.

Permíteme pues alabarte de la manera que más te gusta, brillando para quienes me rodean.

Haz que predique sin predicar, no con palabras sino con mi ejemplo, por la fuerza contagiosa, por la influencia de lo que hago, por la evidente plenitud del amor que te tiene mi corazón. Amén.

El Cardenal John Henry Newman fue autor de esta oración.

‍Las Misioneras de la Caridad rezan esta oración todos los días después de la Misa, como lo hizo la Madre Teresa.

Oración a Jesús Solitario en el Santísimo Sacramento

Oración a Jesús Solitario en el Santísimo Sacramento


Oración a Jesús Solitario en el
Santísimo Sacramento
(al acostarse)

¡Oh Divino Jesús! que durante la noche
estáis solitario en tanto tabernáculos del
mundo, sin que ninguna de vuestras
criaturas vaya a visitaros y adoraros.

Yo os ofrezco mi pobre corazón, deseando
que todos sus latidos sean otros tantos de
amor y adoración. Vos, Señor, estáis
siempre en vela bajo las especies
Sacramentales, vuestro amor
misericordioso nunca duerme ni se
cansa de velar por los pecadores.

¡Oh Jesús amantísimo!, ¡Oh Jesús
solitario!, hace mi corazón cual
lámpara encendida; en caridad se inflame
y arda siempre en vuestro amor.

Vela ¡oh centinela Divino!, vela por el
mísero mundo, por los sacerdotes, por las
almas consagradas, las extraviadas,  por
los pobres enfermos cuyas noches
interminables necesitan tu fortaleza y tu
consuelo, por los moribundos y por éste tu
humilde siervo que, para mejor servirte,
descansa pero sin alejarse de Ti, de tu
Sagrario..donde vives en la soledad y el 
silencio de la noche.  

Sea siempre bendito, alabado, adorado,
amado y reverenciado el Corazón Sagrado
de Jesús en todos los Sagrarios del 
mundo. Amén.